Pues bien, iba yo de regreso del CIDE, salía del metro Viaducto (como todos los días) y me subía a un pesero que recorre la calle de Coruña y me acerca a mi casa. El silencio de un día lluvioso y gris contrastaba con el borrachín medio muerto a fuera de los tacos al pastor (en donde te venden 5 tacos por 10 pesos) que están enfrente de la parada de peseros.
Las personas de esta ciudad tienen comúnmente una cara dura y de pocos amigos, y digo que Octavio Paz se equivocaba cuando dijo que la máscara del mexicano era el hermetismo y la sonrisa. Yo digo, y esto lo digo desde el marco contextual de mi experiencia en el trayecto Tacubaya-Viaducto-Coruña que las personas son como un monstruo esperando cualquier cosa para reaccionar. Y un choque un toque clash, la mirada, el grito, la disculpa, el reniego
Como esa vez que iba en el metro y se desmayó una mujer. Todos la veían con sorpresa, pero nadie hacía nada.
El punto de todo esto ocurre en Coruña, en el vaivén y traqueteo del pesero se oye una música singular. Es una de esas piezas que uno presupone, ya como falacia ad hominem, basura menos que desechable. Y aún así, de seguro ya la han oído. Se llama "si alguna vez" de edi lov y la factoría. Lo más triste de esto es que el sonido salía de un altavoz de celular de una niña que lo cantaba inspiradísima.
Esto nos deja una doble enseñanza, la tecnología puede servir para joder a las personas y que aquella niña, cuya madre estaba sentada al lado (peinada con forma de tubos de plástico), es una futura tonta, vacía, masa, aficionada a los eventos de masas.
Sí, una vez más reitero mis falacias de generalización y ad hominem, sin embargo, uno podría decir que se tiende a eso cuando eres una niña de no más de 13 años aficionada al reguetón (ti po edi lov, hay quién podría argumentar sobre vico c y otras cosas). ¿Qué por qué? Por letras sin sentido o con cierta dificultad y por su naturaleza a vender.
Sin más que decir, les dejo un video de las chicas de Puf Puf Ami Yumi y la Tokio Ska Paradise Orchestra jaja. Saludos
3 Response to Nigga y la tristeza de un día de septiembre
órale , ¡qué aventura! en fin .... Tokyo Ska paradise rifa.... saludos
muy bueno el pos
Ando desaparecida de este tu mundo raro. Seguro algún día nos encontraremos, seguro nos vimos en el concierto de Quilapayún y ni te reconocí.
Muy frío el post aunque entiendo perfectamente el sentimiento. Interesante la forma en la que terminaste. Me gustó.
Un abrazo desde el sur.
Publicar un comentario